En la consulta médica de los especialistas en neurología, la migraña es el motivo más frecuente por el que los pacientes buscan ayuda profesional.
Las migrañas pueden ser discapacitantes para quienes las padecen, ya que además de ser un dolor de cabeza intenso y pulsante en una mitad del cráneo, suelen estar acompañadas de síntomas como náuseas, vómitos, sensibilidad a la luz y a los sonidos.
Se trata de una enfermedad que merece mucha atención porque afecta física y emocionalmente a las personas, perjudicando tanto su vida laboral como personal.
El proceso que ocurre en el cerebro que lleva a las migrañas ha sido investigado exhaustivamente. Lo que se sabe hasta ahora es que éstas ocurren cuando se genera un estímulo en una glándula específica del cerebro que libera “despolarización”, una onda se transmite por todo el órgano, mandando señales de dolor.
Se puede establecer que una migraña es crónica cuando cumple ciertas características como repetición en diferentes ocasiones y por un período de tiempo determinado, lo que requiere un tratamiento específico.
Por otro lado, se determina que es una migraña “aguda” cuando la persona la ha sufrido en una o dos ocasiones en su vida.
Aunque no existe un rango de edad en el que las migrañas sean más frecuentes, la edad puede determinar la causa de esta enfermedad. Por ejemplo, cuando se presentan dolores de cabeza intensos en adultos mayores por primera vez en sus vidas, es probable que éstos se deban a otras enfermedades.
Hasta ahora, no se conocen factores que llevan a que una persona que nunca ha tenido migrañas empiece a tenerlas, pero sí aquellos que las provoquen en personas que ya sufren estos dolores de cabeza. Entre estas causas están los desvelos, situaciones emocionales graves y ayunos prolongados.
Otro tema en torno a las migrañas que ha generado mucha discusión e investigación ha sido el supuesto impacto de algunos alimentos en estos dolores de cabeza. Sin embargo, hasta ahora no se ha encontrado evidencia que apoye esta teoría.
Se han hecho estudios en los que se divide en dos grupos a personas con dolor de cabeza intenso, o migrañas. A un grupo se les dan cierto tipo de alimentos, como el café, el queso o el vino tinto, y al otro no.
Los estudios realizados hasta ahora no han encontrado diferencia en la incidencia o intensidad de las migrañas entre ambos grupos de pacientes.
Por ello, actualmente los neurólogos individualizan el caso de cada paciente y no incluyen dentro del tratamiento la prohibición de ningún alimento.
Al momento de diagnosticar a un paciente con migraña, se diferencia entre los tipos de dolor de cabeza que existen. En primer lugar, se debe determinar si la migraña es un dolor primario, es decir, una enfermedad por sí misma, o secundario, causada por otra enfermedad del cerebro.
Dentro de los dolores primarios está la cefalea tensional, que, junto con la migraña, es uno de los dolores crónicos más frecuentes primarios de cabeza.
Para diferenciar entre ambos se considera que una persona con cefalea tensional tiene dolores menos intensos y persistentes que los causados por la migraña. Además, estos suelen presentarse en toda la cabeza y no están acompañados de náuseas o vómitos.
Para el diagnóstico de migraña, las recomendaciones internacionales indican que sea por medio de criterios de diagnóstico: un paciente debe cumplir con ciertas características.
Una vez que se realiza este diagnóstico se hacen estudios de imagen y de laboratorio para descartar que el dolor de cabeza esté siendo causado por alguna enfermedad o tumor en el cráneo.
El problema de la migraña es que no es curable en todas las personas. Cuando un paciente tiene varios años con dolor de cabeza, las posibilidades de que se quite por completo el dolor pueden ser bajas, pero, al mismo tiempo, se suelen controlar muy bien.
Cuando se trata un dolor de cabeza crónico, para poder decir que un tratamiento es exitoso, se debe de tener una respuesta al menos de un cincuenta por ciento de reducción en los síntomas. Sin embargo, lo que se ve en la práctica médica es que cuando se hace un tratamiento correcto y se aplican las medidas adecuadas el porcentaje es mucho mayor que esto.
La migraña es una enfermedad muy particular porque es incapacitante para quien la padece, pero que al mismo tiempo es difícil de entender para las personas que lo rodean, por lo que a veces no se le da la importancia que amerita.
Es fundamental poder distinguir cuándo un dolor de cabeza necesita atención profesional, tomando en cuenta que, si éste es intenso e interfiere en las actividades diarias de una persona, se necesita de una evaluación completa para determinar que la causa realmente sea una migraña o un dolor de cabeza primario y no un síntoma de otra enfermedad.
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