¿Te has dado cuenta de lo fascinantes que son tus dientes? Son la herramienta perfecta para triturar la comida y lo hacen a diario sin fracturarse por muchos años.
Pero con el paso del tiempo y la falta de cuidados adecuados, nuestra dentadura puede verse muy afectada e incluso puede presentar un proceso de desalineación.
A veces parecería que no encajan bien en nuestra mandíbula y tenemos que recurrir con odontólogos especialistas que evalúen el caso y nos propongan alternativas de solución.
En general, podríamos decir que la dentadura de los humanos no es perfecta, pero ¿por qué la de los animales sí?
En este artículo te contaremos de los motivos del por qué a diferencia de los animales, nosotros los humanos podemos llegar a presentar los dientes desalineados.
Es un hecho que los animales tienen los dientes alineados, la pregunta es: ¿por qué ellos sí y nosotros no?
Es importante decir que esto no es una característica innata en los humanos, de hecho, algunos pueblos del mundo que siguen viviendo de la caza y la recolección tradicional, tienen los dientes correctamente posicionados.
Entonces, ¿qué sucede? La respuesta corta no es que nuestros dientes sean demasiado grandes, sino que nos encontramos inmersos en un proceso evolutivo generacional donde nuestros huesos maxilares van modificando su tamaño en función de los tipos de alimentos que comemos.
El tamaño y la forma de nuestros dientes está pre-programada genéticamente, es decir, que no se pueden cambiar según las condiciones bucales. Pero no sucede así con los huesos maxilares.
Aunque su tamaño depende de las variables genéticas y generacionales de cada individuo/raza/población, también del entorno en el que vivimos: se alarga con el uso, sobre todo durante la infancia.
Esto quiere decir que un mayor esfuerzo al masticar resulta en un mayor crecimiento del hueso en el que se anclan los dientes.
El desarrollo propio de nuestro sistema masticatorio está basado en el tipo de alimentos que comemos, su consistencia y su contenido, luego entonces, el desarrollo de este sistema desde la infancia, va modificándose con el paso de los años.
Para ejercitar nuestra mandíbula es necesaria una dieta dura. Así, la dieta determina la adaptación de la mandíbula al tamaño de los dientes, tanto en los humanos, como en los animales.
Los animales lo han logrado durante toda su existencia. El problema es que, durante la mayor parte de ese tiempo, nuestros ancestros no alimentaron a sus hijos con papillas como hacemos nosotros.
Lograr que nuestros dientes se posicionen de la manera en que naturalmente deberían hacerlo, no es trabajo difícil si se trata de manera temprana.
Generalmente los animales enfocan su alimentación en la ingesta de alimentos con determinada consistencia. Ellos no consumen alimentos procesados o papillas, a diferencia de nosotros.
Es por ello que, en el caso de los humanos, el consumo de alimentos de diversas consistencias favorecen el adecuado funcionamiento y desarrollo del sistema masticatorio.
Si ya presentas tus dientes en una posición desalineada, se recomienda que, en el caso de los niños, los dentistas diagnostiquen y propongan alternativas de tratamiento.
El tratamiento puede ser con aparatos ortodónticos específicos para el caso particular de cada paciente, en un tratamiento denominado ortodoncia interceptiva y ortopedia dental.
Para los adultos, la ortodoncia (alineamiento de los dientes) o por tratamiento quirúrgico para estimular el crecimiento, son una buena alternativa.
En resumen, tener los dientes desalineados o en mala posición es una característica adquirida por nosotros mismos gracias a dietas blandas, no por nuestra naturaleza.
La diferencia esencial entre animales y humanos en relación al posicionamiento de las piezas dentales se debe principalmente a la consistencia y tipo de alimentación que unos y otros consumimos.
Si tienes los dientes desalineados, no dudes en acudir a una cita de diagnóstico y valoración con un odontólogo de práctica general o un especialista en ortodoncia, quienes te ofrecerán las mejores alternativas para cuidar y alinear tus dientes como parte de tu salud integral, favoreciendo además tu sonrisa y tu autoestima.
Centro Académico de Atención Odontológica
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