El cuidado correcto de la piel es un tema muy importante, después de todo, la piel es el órgano más grande del cuerpo y protege a nuestro organismo de elementos externos.
Afortunadamente, el cuidado de la piel continúa adquiriendo popularidad, por lo que quizá ya hayas leído algunos artículos sobre el beneficio que representa utilizar protección solar adecuada.
Tan es así que, actualmente, numerosas marcas comerciales de maquillaje agregan protector solar a sus reactivos o viceversa; diversos protectores solares añaden pigmentos para emular nuestro tono de piel.
¿Qué impacto tiene la luz solar en el cuidado de la piel?
Si bien la exposición moderada a la luz solar nos aporta Vitamina D y nos ayuda a controlar algunos trastornos dermatológicos, también es causante de quemaduras y arrugas. Incluso puede acelerar el proceso de envejecimiento y crear reacciones alérgicas.
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), entre sus efectos agudos existen reacciones que podrían ser consideradas como factor de riesgo para el cáncer o que podrían reactivar virus como el del herpes labial.
Es por ello que, entre las recomendaciones de la OMS se encuentran:
- Limitar el tiempo que pasamos bajo el sol
- Evitar aparatos de bronceado
- Utilizar ropa protectora
- Mantenernos bajo la sombra para prevenir el daño
- Utilizar cremas protectoras
¿Cuál protector o maquillaje será mi mejor aliado?
Para responder a esta pregunta es importante que pensemos en la finalidad del producto. Mientras que el maquillaje se enfoca a cubrir imperfecciones en la piel o neutralizar ciertas zonas, el protector solar nos protegerá de los efectos nocivos de la radiación solar.
Esto no significa que alguno de ellos no pueda contribuir a la intención del otro, sino que la medida en la que lo harán será menor a la indicada por los expertos.
Sabemos que permanecer todo el tiempo bajo la sombra no es una solución práctica debido a nuestro ritmo de vida. Sin embargo, tú puedes comenzar a implementar acciones preventivas a partir de hoy para contar con una mejor protección solar.
Algunas de estas acciones incluyen adquirir productos de calidad y consultar con expertos en caso de tener algún padecimiento a nivel dermatológico. También deberás confirmar que estás empleando la dosis adecuada de producto.
Por ejemplo, si utilizas maquillaje con protector solar, es importante que te asegures que el factor de protección solar (SPF) sea de mínimo 30 (recuerda que entre más alto sea el SPF mayor protección brindará) y aunque siempre quedará la duda de si realmente se "ofrece lo que se promete", puedes optar por el protector solar con color y reaplicar cada dos horas.
En cuanto al cuidado de la piel nunca es tarde para dar ese primer paso. Si optas por hacer uso de maquillaje con protección solar o protector solar con color, lo importante es asegurarte de hacerlo de la forma correcta. Tu piel y cuerpo te lo agradecerán.
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